Referencias médicas

"Conozco el agua LAURETANA desde hace algunos años y después de estudiar sus características fisicoquímicas y sus efectos fisiológicos, generalmente la recomiendo en las dietas para la pérdida ponderal y para los atletas. La aconsejo a las pacientes porque un agua con un residuo fijo tan bajo permite un excelente intercambio hídrico, estimulando la diuresis, eliminando el exceso de sodio y ayudando incluso en la lucha contra la llamada celulitis (Dermo Paniculopatía Edemato Fibroesclerótica - PEFS). También los pacientes que generalmente me hablaban de dificultades para ingerir la cantidad adecuada de líquidos diarios, con esta agua, en cambio, logran introducir la dosis correcta, gracias a la ligereza que la caracteriza. Yo mismo lo uso a diario por sus indudables cualidades también organolépticas ".

"Uso LAURETANA y hago que la usen mis clientes recomendándoles que integren su uso durante la comida con una bebida abundante apenas levantados. De hecho, la noche es el período más largo de abstinencia de alimentos sólidos y líquidos y la mañana, recién levantados, una bebida de medio litro, aproximadamente, permite que se verifique una purificación fisiológica intensa. La extraordinaria escasez de residuo fijo permite que LAURETANA sea absorbida casi inmediatamente; esto crea un efecto similar a una infusión venosa por goteo. La tendencia a encontrar rápidamente un equilibrio entre solventes (agua) y solutos (proteínas, escorias metabólicas, residuos nitrogenados como urea y amonio, ácido úrico) pone a disposición estos últimos para ingresar en el círculo hemático y someterse a la filtración renal; esta, incrementada por el crecimiento del volumen circulante, hará que los subproductos del metabolismo pasen a la orina, permitiendo una depuración eficaz. Un regalo de alta tecnología de la naturaleza para defender y promover la salud".

"Para comprender la importancia del agua en el atleta, es suficiente tener en cuenta que el cuerpo humano está compuesto de agua por casi dos tercios de su peso corporal; por otra parte, durante la realización de una actividad física moderada, la sudoración causa la pérdida de aproximadamente 1-2 litros por hora y, en condiciones climáticas particulares (cálido-húmedo), esta cantidad aumenta aún más. Por esta razón, la tutela de la salud del atleta comienza con una rehidratación adecuada, es decir, una ingesta de 2-3 litros de agua al día, por lo menos. Las características organolépticas y químico-físicas del agua LAURETANA, gracias a su bajo residuo fijo (14 mg/l), al pH ligeramente ácido (5.8) y al bajo contenido de sodio (1.1 mg/l) hacen de ella un agua mineral especialmente recomendada para un uso diario y abundante. De hecho, estas características permiten una función renal óptima y favorecen los procesos digestivos, contribuyendo a restaurar rápidamente la homeostasis metabólica, en el atleta de resistencia, al final de las intensas sesiones de entrenamiento".

“La litiasis urinaria (cálculos urinarios) representa el 15-20% de las enfermedades nefro-urológicas. La terapia hidropónica con aguas minerales es de fundamental importancia en los programas para la prevención y profilaxis de las recidivas. En este sentido, se ha demostrado la necesidad de beber al menos dos litros de agua distribuidos durante toda la jornada. Cuanto más bajo es el contenido de minerales en el agua, mayor será su eficacia en la prevención de los cálculos urinarios. Debido a su composición iónica, el agua mineral LAURETANA, con escaso contenido de sales y concentración mínima de minerales (residuo fijo de solo 14 mg/l), pertenece al grupo de aquellas aguas que pueden clasificarse como mínimamente mineralizadas. Debido a su composición iónica, el agua mineral LAURETANA, con escaso contenido de sales y concentración mínima de minerales (residuo fijo de solo 14 mg/l), pertenece al grupo de aquellas aguas que pueden clasificarse como mínimamente mineralizadas.

"El residuo fijo es la cantidad de minerales, indicada en miligramos por litro, que permanecen en 1 litro de agua después de haber hervido a 180ºC. Cuanto más bajo sea su residuo, más ligera será el agua. Un agua ligera es más útil para el organismo puesto que favorece más rápidamente el recambio hídrico y la diuresis. La dureza total de un agua se indica en grados franceses (°f) y expresa la cantidad de sales de calcio y magnesio que contiene. Cuanto más bajos sean los valores de dureza del agua, más se definirá como "dulce" y será preferible a las aguas "duras", que están contraindicadas en numerosas patologías médicas, por ejemplo, cálculos renales y hepáticos. Lauretana con una dureza total, solamente de 0.37 °f, no tiene contraindicaciones en el uso cotidiano. El sodio. Son preferibles las aguas minerales con bajo contenido de sodio. Lauretana, con su concentración de sodio de 1.1 mg/litro, está indicada, por tanto, en las dietas pobres de sodio y no tiene contraindicaciones para los sujetos que padecen hipertensión arterial".

"A menudo pensamos que el agua sea importante en la nutrición humana por el aporte de los minerales que contiene; en realidad, la función del agua es primaria para la hidratación de los tejidos, para el transporte, la depuración orgánica y la termorregulación. Para desempeñar del mejor modo posible estas funciones, por tanto, es cierto lo contrario: que la pureza de un agua y su ligereza, es decir, la cantidad reducida de minerales, son las características más adecuadas para estos procesos. De hecho, la aportación de minerales es realizada espléndidamente por el mundo vegetal que, a través de frutas y verduras, proporciona sales en cantidad y, sobre todo, fácilmente asimilables. El valor que revela esta calidad del agua se encuentra en todas las etiquetas y es el residuo fijo a 180° C. Este valor tan importante debería ser inferior a 30-40 mg/l. y, en todo caso, cuanto más bajo sea, más ligera y purificadora será el agua... otro punto que debería guiarnos en la elección del agua "ideal" es el pH: de hecho, un pH ligeramente ácido, comprendido entre 5,5-6, indudablemente favorecerá la digestión".